martes, 18 de marzo de 2008

A 25 años del Bicentenario

Gualeguay llegará, el próximo miércoles 19, al ducentécimo vigésimo quinto aniversario de su fundación. Aquel 19 de marzo de 1783, don Tomás de Rocamora fundó la primera de las tres Villas (Concepción del Uruguay, el 25 de junio y Gualeguaychú, el 18 de octubre) que fundaría ese mismo año. Aquella Villa de San Antonio del Gualeguay Grande, comprendía un total de 56 manzanas donde vivían los 150 vecinos de entonces.
Hace 225 años comenzaba la historia de Gualeguay, y esto me sirve de excusa para buscar en el archivo una revista que se publicó hace 25 años con motivo del festejo del bicentenario de la fundación de la ciudad.
Esta revista fue una publicación de la Comisión Central de Homenaje al Bicentenario de Gualeguay, bajo la dirección de Mario Alarcón Muñiz, con la colaboración de Humberto Pedro Vico, Ricardo Altinier, Roberto Beracochea, Juan María Gianello, Eduardo J. Echegaray, Susana Quintana de Lafourcade y María Carolina Alarcón; con fotos de André Baranoff.
La revista hace un recorrido por la historia y las diferentes actividades de nuestra ciudad. Han pasado 25 años de esa publicación y las condiciones de hoy, no son las de entonces. No hago ningún juicio de valor y prefiero dejar a criterio del lector si son mejores o peores.
Miro y releo la publicación, con sus páginas amarillas por el paso del tiempo, y me digo que las épocas han cambiado.
Hojear esta revista es recorrer poco a poco la ciudad con sus edificios emblemáticos: la parroquia San Antonio, frente a la plaza Constitución donde nos juntábamos con mis compañeros de la secundaria, antes de entrar a clase en la antigua “Comercio”; el Club Social; el Teatro Italia; la Sociedad de Fomento Educacional con la Biblioteca Popular; la Escuela Normal; la Escuela Nacional de Comercio; la Escuela de Artes Visuales; etc.
Doy vuelta las páginas y pienso en que las cosas han cambiado desde ese 1983 hasta hoy. Miro las fotos de una nota que se titula “El nuevo Carnaval” que dice textualmente: “El nuevo carnaval de Gualeguay, ejerció una notable influencia en las ciudades vecinas a tal punto que también Gualeguaychú y Concepción del Uruguay, a partir de 1980 y 1981 respectivamente, adoptaron modalidades similares a las inauguradas en nuestra ciudad en 1979. En esto tuvo también particular incidencia el programa de giras de las comparsas fuera de la ciudad.” “...tanto Macumba como Si Si han mostrado el esplendor del carnaval de Gualeguay”. ( ...)
Sigo hojeando y encuentro otra nota: “Expoguay”. “Iniciada en 1977 con todo el carácter de una corazonada en la que pocos creían, fuera de sus optimistas organizadores, encabezados por el entonces intendente municipal, profesor Hugo Hernán Quatrocchi...” “...Expoguay se ha convertido en una de las realizaciones anuales tradicionales de nuestra ciudad. Se la define oficialmente como una muestra industrial, comercial, artesanal y cultural...” “Una prueba de su arraigo y del interés que despierta, la da el hecho de haber sido declarada, en 1980, Fiesta Provincial, con el auspicio oficial del gobierno entrerriano”.(...)
Sigo adelante en los recuerdos y me detengo en otra nota firmada por M.A.M. (Mario Alarcón Muñiz) titulada “Un perfil industrial todavía indefinido”, con una volanta: “Los valiosos esfuerzos actuales no alcanzan para diseñar el futuro”. Dice en un párrafo: “...el perfil industrial de Gualeguay –aún modesto- se conforma principalmente por Rolling Forms (formularios para sistemas de computación), Tecnografic (cuadernos y repuestos escolares), Cerámica Gualeguay (vajillas domésticas y objetos ornamentales), CERSA (calzado deportivo), Meda Hnos. (acoplados), Metaltech (estructuras metálicas), Frigorífico Juchco (elaboración de carne equina), Frigorífico Soychú (faenamiento de aves), Molino Arrocero Gualeguay, Molino Harinero José María (ex Santa Luisa), Molino Druetta (elaboración de maíz) y Manufactura Peletera Gualeguay (pieles), además de numerosas industrias menores en las que se fabrican acumuladores, bloques de hormigón, muebles, bombillas, dulces, lácteos, embutidos, envases de polietileno, material gráfico, artículos de hierro, hojalata, mosaicos, pastas, bebidas gaseosas, productos de panificación, etc.” (...)
Dije que no iba a hacer un juicio de valor sobre las condiciones actuales de la ciudad, solo pretendo reflejar -sobre citas periodísticas- cómo era el Gualeguay del Bicentenario. Dejo al lector la tarea de analizar, meditar y sacar conclusiones sobre aquella ciudad de principios de los ’80 y ésta, 25 años después. Solo me permito una breve reflexión: Gualeguay cuenta hoy con un flamante gobierno, elegido por el pueblo, que guía los destinos de la ciudad. Tanto el intendente, Luis Erro, como sus colaboradores, y varios concejales, son jóvenes, promedian los 40 años de edad; personas que no están contaminadas con los vicios de la “vieja política”.
Ellos, tienen la oportunidad y la responsabilidad de gobernar, de encontrar soluciones a los problemas de la ciudad. Ellos, son dueños del momento propicio para cambiar las cosas. Ellos, tienen la oportunidad de hacer, que los que piensan que algunas cosas no van a cambiar, estén equivocados.

Claudio Carraud
ccarraud@hotmail.com
Publicado en Gualeguay al día el 16/03/08

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, soy Victoria Costa Lafourcade, nieta de Susana Quintana de Lafourcade y te agradezco que en tu escrito nombres a mi abuela, gran mujer culta y mejor persona aún.
Gracias y felicidades por los escritos.
Saludos.
Victoria