sábado, 16 de agosto de 2008

La sensación de inseguridad


Abraham H. Maslow (1908-1970) doctor en Psicología fue el autor en el año 1934 de la teoría psicológica conocida como “Jerarquía de las necesidades de Maslow” o “Pirámide de las necesidades de Maslow”.
Maslow, de origen judío, nacido en Nueva York fue considerado uno de los más importantes psicólogos humanistas estadounidenses. Su teoría sobre las necesidades del ser humano es muy utilizada -hoy día- en muchas disciplinas como la publicidad y el marketing.
La llamada “Pirámide de Maslow” trata de una jerarquía de las necesidades del ser humano, graficada en una pirámide de cinco niveles. Los primeros cuatro niveles se agrupan en las necesidades de déficit y el nivel más alto de las necesidades del ser. Las necesidades de déficit pueden ser satisfechas, las del ser es una fuerza impelente continua.
En la base de la pirámide se ubican las necesidades fisiológicas: alimentarse, respirar, descansar, etc. En el peldaño que le sigue se agrupan las necesidades de seguridad en un sentido amplio: física, de empleo, de recursos, moral, familiar, de salud, de propiedad privada. Le siguen más arriba las necesidades de afiliación: amistad, afecto. En el cuarto nivel, las necesidades de reconocimiento: respeto, éxito, confianza. Y por último, en el quinto peldaño -la punta de la pirámide- las necesidades de autorrealización.
Como lo describió Abraham Maslow, hace más de setenta años, las necesidades de seguridad son básicas para todo ser humano.
La realidad que se vive en nuestra sociedad hace que -en muchos sentidos- ese peldaño de la famosa pirámide, esas necesidades básicas de seguridad, no estén satisfechas, sobre todo las que tienen que ver con la seguridad física y de la propiedad privada.
Los problemas que existen en nuestro país hacen que el tema de la inseguridad sea una verdadera preocupación en la opinión pública, porque la sentimos todos y cada uno.
En todos los medios de comunicación vemos a diario los problemas de inseguridad que llegan a índices que son alarmantes y que tienen su origen en diferentes motivos.
La inseguridad en nuestra ciudad
Gualeguay no está al margen de lo que ocurre en casi todo el país con el problema de la inseguridad. La ciudad ha crecido y proporcionalmente al crecimiento demográfico sobreviene el aumento delictivo. Y la sensación de inseguridad es una de las realidades que viven los gualeyos.
El Jefe de Policía Comisario Mayor Alejandro Moschen en declaraciones al programa “Lo bueno, lo malo, lo feo”, sobre la sensación de inseguridad y sobre su gestión dijo que “Si tengo que hacer una evaluación de estos 6 meses estoy conforme. Sacamos las estadísticas y esto también sirve para definir esa famosa sensación de inseguridad. Desde el punto de vista policial, insisto, estamos conformes”.
Según lo declarado por el Comisario Moschen, la policía de Gualeguay cuenta con más de 250 efectivos, pero a esta cifra se le debe restar el personal administrativo, médicos, mecánicos, técnicos de criminalística y lo que queda es lo que se distribuye en la ciudad y el departamento.
Si tenemos en cuenta que la cantidad de habitantes del departamento está en alrededor de 48 mil habitantes y que la cantidad de efectivos sería del orden de los doscientos, la relación es de 1 policía cada 240 habitantes. Cabe la pregunta: ¿esta cantidad de efectivos policiales es poca?
En la provincia de Buenos Aires la relación es de 1 policía cada 750 habitantes. En la ciudad de San Rafael, en la provincia de Mendoza hay 1 efectivo policial cada 563 habitantes, mientras que en la ciudad de Mendoza la relación es de 1 policía cada 212 habitantes. San Miguel de Tucumán tiene 1 policía cada 562 habitantes. Por otra parte, en la provincia de Misiones la relación es de 1 policía cada 512 habitantes y en la ciudad de San Francisco, Córdoba, una ciudad con 62 mil habitantes, la relación es de 1 efectivo cada 425 habitantes.
¿Qué pasa en otros países? En Panamá, por ejemplo, la relación es de 1 policía cada 180 habitantes. En Costa Rica 1 cada 352 habitantes. En España, más precisamente en Avilés, una ciudad con 83 mil habitantes, la relación es de 1 policía cada 706 personas y en Gran Canaria, 1 policía cada 376 ciudadanos. En Europa se considera que la relación ideal debe ser de 1 efectivo cada 1000 habitantes, por supuesto que la realidad europea no se condice con la de América, pero vale como dato.
Si se toman en cuenta solamente los promedios, en los países de Centroamérica la relación es de 1 policía cada 490 habitantes, mientras que en Sudamérica es de 1 cada 380 habitantes. Según algunos especialistas, la relación ideal es de 1 policía cada 250 personas.
Todos estos números no hacen más que dejar muy en claro que el problema de la policía de Gualeguay no pasa por la cantidad de efectivos con que cuenta. ¿Cuál es el problema entonces?
Según las declaraciones del Comisario Moschen, la policía cuenta “actualmente con 5 móviles en el comando, más la camioneta de la guardia especial que es el antiguo GIA, más la de la Brigada, 4 bicicletas, 4 motos, la Primera tiene 2 autos, la Segunda un auto y una camioneta reparada que se le entregará ahora. Entiendo que muchos vehículos no están lindos pero están andando”.
Lo que se interpreta de lo dicho por Moschen es que no se pueden movilizar más de 70 u 80 efectivos, es decir, menos de la mitad de la cantidad total. ¿Qué pasa con el resto? Si existe un problema de movilidad, porque el departamento es muy extenso, se deben encontrar las soluciones adecuadas.
Me pregunto: ¿le cabe solamente al jefe de Policía encontrar una solución? ¿No deberían colaborar en el tema de la inseguridad, Luis Erro, como intendente, el senador Hernán Vitullo y el diputado José Jodor?
Quizás, si el Ejecutivo Municipal junto a los legisladores provinciales realizaran las gestiones correspondientes a nivel provincial, se podría conseguir una mayor cantidad de vehículos y resolver, de esta forma, los aparentes inconvenientes de movilidad que tiene nuestra policía.
La seguridad, tal como lo definió Maslow en el siglo pasado, es una necesidad básica del ciudadano. El Estado es quién debe instrumentar los recursos necesarios para que esa “sensación de inseguridad” no exista en cada uno de nosotros.
Claudio Carraud
ccarraud@hotmail.com
Publicado en Gualeguay al día el 17/08/08

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quiro saver sobre Acuña Maurio gracias